DESTRUIR ESPAÑA (27 ENERO 2014, ¡mi primer libro!)
En tren de Barcelona a Bilbao.
Cerca de Tudela, me dirijo a la cafetería para tomar el pulso al ambientillo del tren en medio del viaje.
Valle del Ebro en Navarra, un limbo español, terreno neutral entre Euskadi, la Corona de Aragón y las
Castillas. Un grupo de catalanes con acento de Lérida no paran de berrear como
animales sobre “puta Espanya”, “Guardia Civil”, “Franco”, “una grande y
libre” y otros fetiches clásicos del antiespañolismo catalán. Era evidente que querían llamar la
atención dejando muy claro que eran catalanes y que les iba la vida en odiar
España. Envalentonados y aborregados en grupo, creaban un ambiente tenso y desagradable en la
cafetería del tren. Como esos adolescentes homosexuales reprimidos que siempre
dibujan pollas en las puertas de los váteres públicos, estos antiespañolistas
de tertulia barata, hablaban de España y Cataluña como si fuese hablar de fútbol, vomitando terminología franquista con más pasión que un
auténtico falangista de la calle Goya de Madrid. Al final, parecían unos
auténticos fachas.
A mi lado, una señora muy
emperifollada los mira con los ojos encendidos. A cada mano, un hijo vestido
idéntico al otro, caspa española en estado puro. No puede contenerse y
farfulla: “Me ponen enferma, qué asco me dan”. Por el acento ha debido de subir
en Zaragoza. Sus ojos tintos como las uvas riojanas que ya se veían al otro lado
de las ventanillas. Trago saliva. Las palabras cargadas de odio profundo se clavan
como astillas de sarmiento en la parte catalana de mi corazón gaditano porque
era obvio que los odiaba sólo por ser catalanes. Pese a lo odiosos que
realmente eran los leridanos, no pude evitar provocar a esta señora diciéndole:
- Debe
usted de entender muy bien lo que dicen para que la pongan tan enferma. O quizá
es sólo por el idioma en el que hablan.
- Estaba hablando con mis hijos
- Muy bien señora, adiéstrelos en el odio
desde bien pequeños.
La sangre garnacha no llegó al
río y la señora simplemente me dio la espalda. Marchó con sus retoños mientras
yo apuraba mi café, lleno de desazón y amargura por el odio y el asco que
inundaban el vagón. Los leridanos seguían vociferando estupideces y me fui
hacia ellos, no podía más. Daban vergüenza ajena. En mi catalán de Barcelona,
los saludé y pusieron una cara entre cómplice y descerebrada. Pensaron que
sería un nuevo amiguito para su terapia de grupo basada en los insultos más
banales. Pero cuando continué pidiéndoles por favor que dejasen de dar voces y
soltar tacos porque era un sitio público y me estaban molestando, sus ojos se
tornaron vinagre tinto como los de la madre anticatalana. El más gallito me
gritó algo sobre barceloneses pijos españoles....
Tres lágrimas de rabia brotaron
de mis ojos. Una por la ignorancia de gran parte de la sociedad española de
todo lo que no es su contorno más inmediato, otra por la falta absoluta de
respeto por las diferencias y la última por unos políticos que juegan con los españoles
a la ruleta rusa del enfrentamiento interterritorial para conseguir más votos
en sus vagoncitos autonómicos. ¿Choque de trenes?. Volví a mi asiento acongojado y deprimido.
Parece que en este país, cuanto más lo conoces y lo has querido amar, más
escaldado acabas. ¿Adónde nos lleva este tren? Un gaditano que aprendió catalán
en Madrid y que vive en Cataluña va camino de Euskadi porque siente también esa
tierra como si fuese suya. Y tiene que
aguantar que una señora aliente el odio a sus paisanos catalanes en sus narices
para que luego éstos lo insulten de la manera más infundada.
Hay que DESTRUIR ESPAÑA, por
completo. Hay que DESTRUIR ESPAÑA, antes de que Ella nos destruya a todos.
Cataluña tiene que independizarse. YA. Cataluña y España necesitan separarse de
una vez por muchas y diferentes razones pero también para poder dejar de usarse
la una a la otra como chivos expiatorios de sus propias miserias y complejos.
Las dos los tienen. Las dos.
El tren va lento, el paisaje
reverdece. Todo se torna más suave. Vacas, caseríos, cielo levemente neblinoso.
Por fin llegamos al norte, pasado el trago de la cafetería, el paisaje vasco me
reconforta y me devuelve la paz. Sí, la paz. Próxima parada, Bilbao Abando.
Final de Trayecto.
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DESTRUIR ESPAÑA (antes de que Ella nos destruya a todos)
Será mi primer libro a partir del
de enero.
Una sátira política y muy personal sobre la España del BOOM y la del PLOFF actual
Asegúrate de que haces "me gusta" en la página de facebook para estar informado
¡¡ La destrucción no ha hecho más que comenzar!!
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DESTRUIR ESPAÑA (antes de que Ella nos destruya a todos)
Será mi primer libro a partir del
de enero.
Una sátira política y muy personal sobre la España del BOOM y la del PLOFF actual
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¡¡ La destrucción no ha hecho más que comenzar!!
Javi,
ResponderEliminarEnhorabuena por la narración. De veras un relato muy bien encontrado.
Sin embargo, permíteme discrepar. Del mismo modo que existe un gran número de personas que maldicen España "por maldecir" y sin ningún tipo de tapujos, existe también un grupo - y me atrevería a decir "igual de numeroso y significativo o más" - que considera apropiado unirnos en lugar de luchar por separarnos.
Nuestra situación política es la que más difícil nos lo pone. No sé cuánto tiempo vamos a poder sobrevivir en un país en el que cada día es noticia el desmantelamiento de una nueva trama de corrupción. Más imputados. Un desmantelamiento en el que incluso la familia Real está salpicada.
Pero debemos intentarlo. Debemos trabajar para que nuestras diferencias nos unan. Para qué nuestro atractivo sea precisamente esa diversificación. Debemos trabajar juntos para definir la España que queremos ser, no la que nos quieran hacer ver que somos.
Esta vez, lo siento, sigo viendo el lado positivo de las cosas ;)
Un saludo desde Deutschland*
Elisabet gracias, gracias como siempre por opinar y bienvenida sea tu crítica y tu discrepancia por tu excelente tono.
ResponderEliminarYo estoy de acuerdo contigo, absolutamente. Lo he estado tanto tiempo que es tan duro para mí ver que esto no tiene arreglo que al final me gustaría ver si aquí en Cataluña somos capaces de crear algo nuevo y desde cero, que merezca la pena y nos aporte bienestar y paz mental.
Digamos que la falta de confianza en que la política cambie me lleva a proponer esta ruptura como revulsivo total. Y no sólo por la política, ya verás que en el libro hay mucha crítica al espalol medio, de a pie sobre lo cutre que es a menudo nuestra sociedad a los niveles más básicos. La pregunta de fondo que plnatea mi libro es:
¿podemos ser tan exigentes con la calidad de nuestra democracia si nos somos capaces de ser ciudadanos de calidad y comportarnos dentro de un vagón de tren?
En el fondo, si España cambiases como estoy seguro que tú lo deseas, sería un país fabuloso y Cataluña estaría encantada de volver. Porque también hay mucha gente en Cataluña que siente que se ha ido todo de madre.
Gracias, Elisabet!
¿Unos jovenzuelos se dedican a berrear insultos y provocaciones en medio de un vagón y lo que mas te molesta es que una señora diga: "que asco dan".? (Claro, a lo mejor tenía que haberles dado las palmas y hasta convidarles a unas cañitas). Vamos. Entre esto y el capítulo que he ojeado de tu libro, puritito pastiche anticastellano condimentado al gusto nacionalista catalán (uy, que malos los castellanoooos! que imperialistaaaaas! que maleducadoooos! que fachas! que ignorantessss! ¿porqe diablos no nos querrán, con tanto cariño como nosotros les tenemos? ) ya me hago una idea de que vas. Gaditano y catalanista. Das para chirigota. Y lo sabes.
ResponderEliminarSoy gaditano y catalanista,
muy de "Mágico" y barcelonista
y no se crean que tarde mucho yo en integrarme
que Barcelona corrio enterita para abrazarme
cuando un buen dia desde lo alto del Monjuiic
Grite: ¡la culpa es de Castilla
y es de MADRIT!
Me uno a lo dicho por "VozCastellana", aunque yo sólo soy español. Me pregunto si no se puede denunciar la portada de ese libro, por apología del terrorismo. Al menos, podrían haber puesto sobre Madrid todas las bombas que tuvieron que soportar allí, por representar a España, y no sólo una.
EliminarHay cosas que os delatan: mientras el autor y los primeros comentarios hablan de sentimientos, de razones y sinrazones intentando construir algo (aunque sea nuevo ya para ello haya de cambiar, que ha eso se refiere con lo "destruir España" y no a nada violento, claro que "cree el ladrón que son todos de su condición..." ), la Voz Castellana poco tarda en insultar y despreciar, como es habitual, ante lo que siente diferente y ni intenta comprender; por cierto, a eso se le llama Pensamiento Único...
ResponderEliminarCurioso. Según tú cuando el autor dice "destruir" en realidad se refiere a "construir". ¿Por qué no dice entonces simplemente "construir"?. ¿Será quizás una estrategia de marketing? ¿y cuando dice que los castellanos son ignorantes y maleducados? ¿Acaso se refiere a que son sabios y corteses?. Puede que sí. Según el último Informe Pisa los estudiantes madrileños están a la cabeza de todo Estado en Lectura, y los de Castilla y Leon, en ciencias. ¿Puedes confirmarme si efectivamente se refería a esto el autor, Xavi?. ¿Se trata de elogios o más bien de un desprecio tras otro lo que se puede leer en el capítulo dedicado a Castilla?.
EliminarYo no creo haber insultado a nadie. Simplemente he puesto de manifiesto mi disconformidad con lo que me parece una visión totalmente sesgada que da un libro.Tampoco creo que a un gaditano le moleste demasiado que le compongan una mala chirigota. Si es así, me disculpo.
Comprendo que cuando se culpa de todo a los castellanos, y se les insulta, tu Xavi, no te sientes ofendido. Pero ¿sabes qué?. Yo SI. Y mucho. Castilla, a diferencia de Cataluña, fue dividida en varias comunidades, totalmente desconcienciada y, en buena parte, despoblada. Por lo que me parece demasiado fácil y desde luego muy cobarde atacarla . Algo así como pegar a alguien que apenas puede defenderse. Así que ¿quien insulta? ¿quien desprecia? ¿quien demuestra pensamiento único?. En mi opinión aquí, y aunque quizá no sea del todo voluntario, ese eres tú, Xavi.
Esoty leyendo actualmente "las nacionalidades españolas" de Anselmo Carretero Jiménez, segoviano y federalista del exilio franquista.
EliminarApasionante la relectura de los reinos de Castilla y de León. Así, por separado comprende uno que ciertamente Castilla ha ido cargando cada vez más con un sambenito totalitarista que no le corresponde. Otra consecuencia más de este Estado tan mal organizado.
La chirigota no me moelsta y aprecio los comentarios.
Con respecto a la bomba, claro que hay provocación pero no es ninguna estrategia de nada. As´´i soy yo. Y quien me conoce lo sabe. Me gusta la provocación como revulsivo y España necesita revulsivos.
Gracias por interactuar
Javier
Todos los extremismos son malos. Yo estoy tan en contra de los que odian basándose en prejuicios, como los que odian basándose en cuentos e historietas que les han enseñado toda la vida (con el único fin de que sean caldo de voto para su proyecto político).
ResponderEliminarComo dices, detrás de todo esto no hay más que un fin político. La gente de la calle podría convivir sin problemas si no fuera porque les han "abierto los ojos". Les han educado en el odio. En Madrid les han educado en el "catalán agarrao" y en Barcelona en el "Madrid ens roba". Todos tienen parte de culpa en esta historia. Y dudo que tenga buen final porque nadie pone de su parte para arreglarlo.
No obstante, yo que vivo en Mallorca y aquí sufrimos como el nacionalismo catalán nos quiere robar la identidad para anexionarnos a sus inventados Països Catalans -tontos no son, si puede arrastrar con ellos a Valencia y Baleares con sus fuertes economías turísticas, mejor- te diré que yo he ido por la calle aquí en Palma y cuando he visto una manifestación con una gran estelada o una pancarta que decía "Autodeterminació dels Països Catalans" he sentido por dentro lo mismo que la señora del tren.
Supongo que se trata de viajar y ver cómo se vive este problema en distintos puntos del país. Estoy seguro de que si yo fuera a Madrid y oyera algunas personas podría hasta solidarizarme con los catalanistas. Pero también estoy seguro que si hablo con un catalanista, tengo claro que ellos hacen con nosotros (en Baleares) lo mismo que exigen a Madrid.
Quizá esto es lo que pasa cuando se ha permitido durante 30 años que los nacionalismos en este país hagan lo que quieran y cuenten la "película" a su manera. Una mentira repetida muchas veces puede parecer hasta verdad. Seguro que esto se podría arreglar hablando entre todos y asumiendo que vivimos en un país con distintas raíces y culturas. Pero claro, ¿quien va a renunciar a su identidad en aras de una identidad nacional común? Nadie.
El autor busca precisamente eso: Crear polémica y además le encanta el protagonismo y ser el centro de lo que sea. Yo querré siempre lo mejor para España y para Cataluña como parte de España que es (aunque moleste) y no lo mejor para sus dirigentes políticos que son los que se la están cargando. Tranquilo Javier que ellos ya la están destruyendo paso a paso. No hará falta mucho más. Ah por cierto, a mí me encanta que sea de Cádiz y muestre tantos sentimientos encontrados por Cataluña y España. Es lo que tiene el sensacionalismo patrio, ya se sea de un sitio, de otro o de ninguno y de muchos a la vez. Ah y no se preocupe, Cataluña no se independiza. Ya puede seguir escribiendo. Y se lo dice un catalán.
ResponderEliminarmuy bien te has ganado una subvención,ahora ya estas integrado ,ets un bon catala,,molt be noi,sigue asi, no tendras problema para depurar tu adn español,pero sabes una cosa ni referendum, ni consulta ,que pena
ResponderEliminarla subvención me dices en qué cuenta me la han ingresado.
EliminarYo no sy catalán no sé de qué integración me hablas.
Yo soy gaditano y elijo Catalunya de manera cerebral, no sin pena por dar la espalda a España
A mí nadi eme dice lo que tengo que decir. Ni mucho menos me paga un duro
Hablar por hablar deporte nacional español
Javier
Es curioso, la culpa de todos los males de Cataluña es de España y de los españoles. Todos los nacionalistas, de cualquier autonomía, le echan la culpa a España, al final resulta que España solo es Madrid. Si con los políticos que tienen (y tenemos el resto de españoles), quieren construir una cataluña nueva e independiente, les va salir un churro, independiente si, pero un churro. Antes de reclamar la independencia, deberían reciclar sus políticos y sus ideales. Porque hasta ahora nadie dice que tipo de sociedad quieren para una Cataluña independiente. Si se separan para seguir igual no hacia falta tanta alforja para tan corto camino. En mi modesta opinión la independencia o la unidad, no es importante, lo verdaderamente importante es mejorar la sociedad de la mejor manera posible, si podemos juntos, mejor, si no, separemonos. Pero con las ideas claras.
ResponderEliminarB.días:
ResponderEliminarSoy nacida en alemania y criada en Figueras (Gerona)desde los 6 hasta los 26 de padres Gaditanos (Alcalá de los Gazules )que fueron emigrantes en Alemania durante 20 años y luego lo fueron en Cataluña ,Casada con un Catalán ,pero mal visto por ser Guardia Civil ,mis padres ,hermanos,suegros cuñados ,algunos tios y primos siguen allí .Tuvimos que marcharnos de Cataluña cuando los Mossos d'escuadra cogieron la competencia de tráfico en Gerona,y tuvimos que marcharnos ,porque para pasarse al cuerpo de los mossos mi marido tenia que volver a examinarse de todo,con examinadores que sabian menos que él de su profesión y dejando atrás sus galones de mando y empezar de cero,cosa a la que no estabamos dispuestos y con todo el dolor de nuestro corazón ,tuvimos que marchar vendiendo nuestra casa ,haciendo la maleta y teniendo que separarnos de nuestros seres queridos y separando a nuestro hijo de un añito de sus abuelos y tios,fue una decisión muy dura para nosotros ,pero no nos arrepentimos.La cuestión es que tenemos algunos familiares los menos a favor de la independencia ,el resto en contra y nosotros no vemos con lógica todo este follón que hay armado ,los que quieren todo en catalán salen perdiendo porq sus hijos sólo aprenden este idioma ,pués en casa lo hablan y en la escuela también y lo poco que dan en castellano lo hablan mal con dificultad pensando mucho lo que van a decir y sin embargo nuestros hijos los de los castellanoparlantes aprenden dos idiomas de su país aunque lo escriben bastante mal porque en la escuela sólo dan 4 ó 5 horas de castellano,y por el resto de pólemica todo gira en torno al vil metal ,y cómo no !Se han dejado comer la cabeza con que Espanya ens roba!No creo que la separación sea la solución ,más bién al contrario ,luego la querrán las demás autonomias y con razón ninguna debe ser más que las otras por mucha riqueza que crean aportar!Yo no entiendo de política, pero si de sentimientos y me duele mucho ver ésta situación que está creando malestar y odio y creo sinceramente que todos éstos politicuchos de tres al cuarto y lamentablemente gente como tú Javier Ríos fomentais ésta situación mucho más sólo por cuatro chavos ,en fin"Pisha" que aproveche! Y perdona si en algo te ofendo ,créeme que no es mi intención!Saludos.
Troll se te ve el plumero!
EliminarSi ,está molt clar Tiago Mv ,a tots els que volem una Espanya unida se'ns veu el plumer! Vosaltres sempre sous les victimes i nosaltres el torturadors!Creus que no em fa mal tot això?Creus que no em sento Catalana?Ara visc a Galicia y tot això es veu molt greu desde aquí ,la gent no comprèn perquè está pasant tot això i jo sincerament et dic que no sem veu el "plumero" se'm veuen els sentiments! que vosaltres nomès enteneu " o amb mí o contra mí" La diferencia entre nosaltres es que teniu masa odi dins ,de miqueta en miqueta s'omple la piqueta i vosaltres la teniu plena ja!Bona sort que la nessesitareu!
EliminarAixò és qüestió de cultura i sensibiitat. Està clar que si els teus pares són castellanoparlants i criada aquí doncs està clar que et sentiràs, Espanyola, Catalana i potser Alemnya etc. però tambè hi ha persones que no ténen els pares de fora, sempre hem parlat catlaà a casa i ens agrada lo nostre igual que a cada escú a casa seva li agrada lo seu. Jo no em sento espanyola, ho sento. Parlo per mí, estic cansada d'haver de justificar el meu idioma a casa meva. I m'han mirat malament a mí tambè per ser catalana a Barcelona. A la meva classe erem 40 nenes i catalanes nomès erem 3. Jo em sentía fatal per que a casa no escoltàvem la Pantoja ni el Manolo Escobar ni teníem pueblo etc. A casa ens agradava el Llach.... un abisme. Tinc amigues que no saben ni que són els pastorets, odien les sardanes, mai han escoltat una poesía en català i el Llach és un tema a part, no els agrada (del seu barri no agrada a ningú, esclar) però ni l'han sentit mai.... de Barcelona., es clar i se senten molt catalanes, també. Evidentment les sensibilitats són molt diferents... depèn del que has mamat. En el cas del Javi es veu que no i jo l'aplaudeixo perquè m'enten molt bé. Ojalà Espanya es haguès tractat bé, però ja estic farta de justificar la meva pròpia cultura a Catalunya, ja no diguem a Espanya. Què ens deixin en pau d'una vegada!
ResponderEliminarPer cert, Javi, el teu llibre és collonut!!!! m'encanta, de veritat! Endavant!!! No tot són les peles, volem una miqueta de respecte i prou. Ojalà la gent d'Espanya ens entenguès una miqueta més. Ojalà Espanya ens haguès acollit una miqueta millor. Un petó, guapo i ojalà la Rahola t'haguès deixat parlar una miqueta més a l'entrevista...
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